Desventajas de un exceso de inventario

Tener un inventario es bastante positivo para una empresa u organización que deseé mantener el orden dentro de sus almacenes, pero ¿Qué pasa cuando hay un exceso de inventario? Seguí leyendo este artículo y enterate.

¿Qué significa que haya un exceso de inventario?

Este fenómeno ocurre cuando una empresa ordena su inventario de manera inadecuada, quedándose con más de lo que el mercado demanda. También puede suceder si la demanda cae drásticamente luego de haber realizado un pedido. 

Tener un exceso de inventario no es algo bueno para una empresa ya que puede perjudicar las tasas de recambio y los costos asociados a la gestión de mercancía. 

A continuación especificaremos las principales desventajas. 

Lo más importante… tu espacio

El mayor problema de contar con un exceso de inventario es la mala ocupación del espacio. Todos esos productos que no pueden venderse ocupan un lugar que puede ser utilizado por otros artículos de mayor rotación.   

Costos de almacenamiento

Como mencionamos en el punto anterior, los productos que no son necesarios ocupan un lugar que puede ser utilizado por otros. Este espacio implica dinero ya que, aunque muchas empresas tienen almacenes adicionales, el contar con un extra de almacenamiento implica un costo, y si una compañía está en crecimiento, le será difícil disponer de recursos para ello.

Además, hay que considerar la mano de obra de los encargados de realizar y mover el inventario excedente.

Reducción en tus ganancias

Tener excedente de mercadería lleva a márgenes de ganancias reducidas en muchas instancias. 

El primer escenario para visualizar es ese donde se venden los productos a un menor costo o se ponen en oferta. Esto es con el fin de incentivar al consumidor a que los compre y recuperar algo de espacio en el almacén.

Muchas de estas ventas se concretan, pero se hacen a un precio muy por debajo del inicial. Por eso, evitar el exceso de inventario permite poder vender productos al costo estipulado y que esto no represente ninguna pérdida significativa para la empresa. 

Acumulación de productos convertidos en desperdicios

Ninguna empresa compra productos para descartarlos. Sin embargo, cuando hay un exceso de inventario, la mayoría de ellos siempre termina venciéndose o deteriorándose. Por ejemplo, empresas que se dedican a trabajar con alimentos frescos, debe tirar los sobrantes cuando se descomponen. 

Por supuesto, eso puede evitarse de dos maneras: la primera es que se le pueda dar una circulación adecuada a los productos para evitar que lleguen al punto de vencerse o dañarse. La segunda, es negarse a almacenar o retener algún producto que no lo requiera.

Riesgos mayores por accidentes

Cada empresa suele tener activado un sistema logístico y de seguridad que garantiza el resguardo de la vida de los trabajadores y de sus bienes. Sin embargo, esto no significa que pueda llegar a ocurrir accidentes en la cotidianidad, como incendios, inundaciones, robos, entre otros.

Tener un exceso de inventario genera una mayor vulnerabilidad y peligro porque hay mayor cantidad de productos que se pueden perder. 

Productos pasados de moda

Otra clara desventaja es correr el riesgo de perder algunos de los productos almacenados, ya sea porque pasaron de moda o porque su demanda ha disminuido considerablemente o porque el mercado simplemente ya no se interesa por ello.

Como lo mencionamos unos puntos más arriba, las opciones frente a esto, es tener que venderlos a un costo menor a la inversión inicial, o en el peor de los casos, deshacerse definitivamente de ellos.

Como hemos visto, tener un exceso de inventario representa un escenario desfavorable para una empresa. Sin embargo, no es el fin del mundo. Con un equipo preparado, y una buena estrategia, se puede realizar una gestión óptima de la mercadería, para lograr así, tener una cantidad justa de productos y no caer en todas las desventajas que implican los excedentes.