Consejos clave para lograr un transporte sustentable y por qué es importante

Un transporte sustentable no solo aporta beneficios para el medioambiente sino también para la empresa.

Se calcula que el transporte es responsable del 18% del CO2 (dióxido de carbono) que se emite a la atmósfera, lo que quiere decir que es una de las principales fuente de contaminación y de los gases de efecto invernadero que contribuyen al calentamiento global.

Sin embargo, la actividad logística no deja de ser crucial dentro de tu empresa, es esencial para mantener el progreso industrial, gestionar la cadena de suministro, de forma que las materias primas lleguen a los centros de producción y las manufacturas al consumidor.

¿Es posible entonces, preservar nuestro medioambiente mientras que la actividad logística, industrial y de transporte se conviertan en sustentables sin reducir la eficacia de nuestra actividad logística? La respuesta es sí, es posible adoptar estrategias para reducir la necesidad y el costo del transporte dentro de la cadena de suministro y de la actividad productiva de nuestra empresa.  A continuación se hablará sobre ellas.

Del 18% de emisiones de CO2 generadas por el transporte, un 16% corresponde al transporte automotor. Pero en la emisión influyen otros muchos factores cuya modificación puede ser una estrategia crucial.

Consejos clave para un transporte sustentable

La aerodinámica del equipo, los hábitos de manejo, el uso de lubricantes de baja fricción, inflado de las cubiertas, son algunos de los factores que mayor incidencia tienen. Por eso, sólo con la adopción de vehículos con mejor aerodinámica y mejores hábitos de manejo, es posible reducir hasta un 80% la emisión de CO2 y con ello el consumo de combustible.

La aerodinámica está relacionada con el modelo de vehículo que, por regla general, cuanto más reciente, mejor será; pero no sólo la aerodinámica sino también con una mayor eficacia, gracias a la utilización de mejores tecnologías e insumos (inflado automático de cubiertas, lubricantes de baja fricción etc.)

Pero además de un buen equipo es fundamental contar con buenos conductores, que hagan un manejo correcto y responsable, evitando los abusos de velocidad, las continuas e innecesarias paradas y sus correspondientes arranques. Sin dudas, estas prácticas son claves para un transporte sustentable. 

Para ello es necesario educar a los operadores, brindar cursos de capacitación e instalar unidades de control para monitorear su manejo, pudiendo saber así si se hace un uso adecuado del motor. De este modo conseguiremos no sólo reducir el combustible y la emisión de CO2 sino también los accidentes, los daños e interrupciones en la cadena de suministro, de forma que esta funcione perfectamente.

La adquisición de equipos nuevos y su correcto funcionamiento inciden directamente sobre el servicio al cliente, evitando fallas, retrasos, accidentes, daños sobre el producto etc.

Todas las empresas deberían concientizarse de la necesidad de operaciones sustentables, no sólo en términos ecológicos sino también de negocios, promoviendo un mundo menos afectado por el cambio climático que impediría la supervivencia de las empresas de muchos sectores.

El cambio es posible y supone, a medio y largo plazo, un ahorro incluso económico pero cuya incidencia más directa se dejará notar sobre la eficacia y el buen servicio de la empresa, satisfaciendo una demanda cada vez más interesada en el respeto al medioambiente.